21 mayo 2009

Manuel Velasco, empresario del textil, adopta desesperadas estrategias para introducirse en el mercado asiático, ante el estupor de su hijo Aureliano.

4 comentarios:

  1. ¡Cráneo privilegiado!
    ¡Talento sin par!

    ResponderEliminar
  2. Aureliano debería dejarse de prejuicios y cortarle un poco las ramas al árbol-bonsai, que está un poco crecido.

    ResponderEliminar
  3. ya no saben qué hacer los del sector textil ante la crisis. el hijo está un poco envejecido, creo que su padre lo ha malcriado y ahora no sabe valorar la originalidad y la lucha del pobre hombre, al que por cierto, le queda muy bien el kimono. Sigue inventando desvaríos. bs

    ResponderEliminar
  4. este dibujo es un abismo muy profundo.
    (esa conexión entre los dos mundos...)

    ResponderEliminar